El jueves de la semana pasada, Cañada de Gómez fue el epicentro de un megaoperativo con 14 allanamientos en el marco de una investigación por venta de estupefacientes. Tras el accionar policial, el intendente cañadense Matías Chale denunció haber sido amenazado por un joven al que identificó como líder de una banda local.
En comunicación con LT8, Chale apuntó contra «el delincuente Darío Marino por intimidar a la sociedad, pero logró lo contrario”. El intendente recordó la presencia del Buzón de la Vida, un punto donde los vecinos pueden realizar denuncias anónimas, y deslizó que allí se fue mencionado el joven en cuestión. “Debe pensar que somos responsables y en parte tiene razón, porque la Municipalidad junta información en los distintos barrios”, remarcó.
Según contó Chale, las denuncias llegan de los cuatro costados de la ciudad y mayoritariamente parten de la voz de madres, preocupadas por el futuro de sus hijos. “Cañada de Gómez tiene poco más de 35.000 habitantes y son las madres quienes, protegiendo a sus hijos, hacen llegar información y hacen las denuncias. Muchas a sus propios hijos ya que no saben qué hacer para sacarlos de las drogas y las bandas como las que lidera Marino”, señaló el mandatario local.
La proliferación de los grupos delictivos en Cañada de Gómez va a la par del crecimiento de la ciudad, aseguró el Chale, y puso en evidencia expresiones del denunciado en redes sociales: “Se mufaba de haber zafado del operativo y dijo que iba a cuidar a sus amigos porque a él lo habían cuidado”. Entre los mensajes, Marino también reconoció tener recursos para poner en peligro a los vecinos. En este contexto, se realizó la denuncia ante la oficina local de Fiscalía y la Policía de Investigación (PDI) comenzó la búsqueda del joven.
“La decisión es no pactar con las mafias y recuperar la tranquilidad de la ciudad”, remarcó Chale y agradeció a todo el arco político cañadense y de la región por el apoyo.
Por último, adelantó la puesta en marcha de otros dos Buzones de la Vida, que serán ubicados en el sur y norte de Cañada de Gómez, aunque invitó a la población “que tiene miedo de que lo vean llevar la denuncia al buzón” enviar un email o llamar a Fiscalía “desde su casa y siempre desde el anonimato absoluto” porque “a las manzanas podridas las tenemos que sacar e irán derecho a la prisión».
Fuente: La Capital