El intendente Juan Pablo Poletti encabezó una recorrida por distintos sectores de la ciudad para monitorear los trabajos de mantenimiento del sistema de drenaje urbano. En esta oportunidad, se focalizó en los barrios Barranquitas Oeste y Barranquitas Pro Mejoras, donde se llevan adelante tareas de limpieza de reservorios, canales troncales y estaciones de bombeo.
Acompañado por equipos de Desarrollo Urbano y de Gestión Hídrica, Poletti observó el funcionamiento de la Estación de Bombeo N°3, punto clave en el drenaje de la cuenca Ecuador. Esta cuenca abarca un amplio sector delimitado por las calles Iturraspe, Aristóbulo del Valle, Fray C. Rodríguez y Estrada. El mandatario también supervisó la limpieza del canal que atraviesa la plaza Perú, donde maquinaria pesada trabajó para desobstruir el conducto que conecta con el reservorio detrás del terraplén Irigoyen.
Durante la visita, se detectó una gran acumulación de basura en los canales, situación que obstaculiza el escurrimiento del agua. «Es un trabajo que se realiza todos los días, llueva o no, pero necesitamos la colaboración de los vecinos. La cantidad de residuos que vimos es preocupante», expresó Poletti. En este sentido, remarcó la necesidad de mejorar la educación ambiental: «Estos plásticos podrían transformarse en bancos, mesas o juegos para plazas, pero hoy están obstruyendo canales».

Más tarde, el intendente se interiorizó sobre el funcionamiento de las estaciones de bombeo. Pablo Troia, coordinador ejecutivo del área, explicó que todas las bombas automáticas están operativas, mientras que las motobombas requieren activación manual. «Los operarios están las 24 horas atentos para que todo funcione correctamente», explicó Troia.
El mantenimiento del sistema de drenaje se realiza los 365 días del año. Sin embargo, en contextos de lluvias intensas, el arrastre de residuos y vegetación exige una mayor intervención de las cuadrillas municipales, que trabajan de forma coordinada con cooperativas y empresas contratadas.
Leandro Depiante, director de Hidráulica y Obras Sanitarias, explicó que el sistema comienza con el ingreso del agua en las cunetas y bocas de tormenta, que derivan en desagües entubados, luego canales a cielo abierto, reservorios y finalmente estaciones de bombeo. “Cada estación se activa según el volumen de agua y su ubicación dentro de la pendiente natural de la ciudad. Por eso es fundamental que todo el sistema esté en óptimas condiciones”, explicó.
La Municipalidad refuerza el mensaje: el compromiso de la comunidad es clave para el buen funcionamiento del drenaje urbano. No sacar la basura durante alertas de tormenta, separar residuos y evitar el descarte en la vía pública son hábitos esenciales para una ciudad más limpia y segura.
