El ministro iraní de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian afirmó que no intención de Irán continuar con los ataques en Israel pero advirtió que no dudarán en proteger sus intereses si es necesario.
Además el funcionario convocó a los embajadores de Reino Unido, Francia y Alemania.
La amenaza de que estalle una guerra abierta entre los enemigos de cada país y el posible arrastre de Estados Unidos puso en alerta a la región. Washington dice que no busca un conflicto con Irán, pero que no dudará en proteger a sus fuerzas y a Israel.
Irán lanzó el ataque por un presunto bombardeo israelí a su consulado en Siria el 1 de abril en el que murieron altos mandos de la Guardia Revolucionaria y que ocurrió tras meses de enfrentamientos entre Israel y los aliados regionales de Irán, desencadenados por la guerra de Gaza.
Sin embargo, el ataque de cientos de misiles y aviones no tripulados, lanzados en su mayoría desde el interior de Irán, solo causó daños modestos en Israel, ya que la mayoría fueron derribados con la ayuda de Estados Unidos, Gran Bretaña y Jordania.
Una base de las Fuerzas Aéreas en el sur de Israel fue alcanzada, pero siguió funcionando con normalidad y un menor de siete años resultó gravemente herido por la metralla, mientras que no hubo otros informes de daños graves.
«Interceptamos, repelemos y juntos venceremos», dijo el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en las redes sociales antes de una reunión prevista a las 1230 GMT del gabinete de guerra para discutir una respuesta al ataque.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, dijo que, a pesar de haber frustrado el ataque, la campaña militar no había terminado y que «debemos estar preparados para cualquier escenario».
El Canal 12 de televisión israelí citó a un funcionario israelí anónimo que dijo que habría una «respuesta significativa» al ataque.
Las potencias mundiales Rusia, China y Francia, así como Egipto, Qatar y Emiratos Árabes Unidos instaron a la moderación.
La misión de la República Islámica ante las Naciones Unidas dijo que sus acciones estaban dirigidas a castigar los «crímenes israelíes», pero que ahora «consideraba el asunto concluido».
El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, prometió medidas aun más duras en caso de que Israel contrataque. El presidente declaró este domingo que Teherán “ha dado una lección al enemigo sionista” con sus ataques y advirtió que “cualquier nueva aventura será respondida con una respuesta aún más dura”.
El jefe del Estado Mayor del ejército iraní, el general de división Mohammad Bagheri, advirtió en televisión: «Nuestra respuesta será mucho mayor que la acción militar de esta noche si Israel toma represalias contra Irán». Además, dijo a Washington que sus bases también podrían ser atacadas si ayudaba a Israel a tomar represalias.
“En estos momentos, la República Islámica de Irán no tiene intención de continuar con las operaciones defensivas, pero si es necesario no dudará en proteger sus intereses legítimos ante cualquier nueva agresión”, publicó el ministro iraní de Exteriores, Hossein Amirabdollahian, en su cuenta de X.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que convocaría una reunión de líderes del Grupo de las Siete principales economías el domingo para coordinar una respuesta diplomática a lo que calificó de ataque descarado de Irán.
El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, dijo que Estados Unidos no buscaba un conflicto con Irán, pero que no dudaría en actuar para proteger a las fuerzas estadounidenses y apoyar la defensa de Israel.
El Consejo de Seguridad de la ONU tenía previsto reunirse el domingo a las 20.00 GMT después de que Israel solicitó que se condenara el ataque iraní y se calificara a la Guardia Revolucionaria de organización terrorista.