Denuncian una presunta estafa en Santo Tomé
Un matrimonio de Santo Tomé denunció públicamente que habría sido víctima de una estafa vinculada a abogados, un prestamista y una escribana de la ciudad de Santa Fe. El relato fue compartido en el programa F5, conducido por el periodista Carlos Fornés, donde expusieron su situación y el temor de perder su vivienda familiar.
Defendidos por el abogado Dr. Walter Ayala, señalaron que dos letrados santafesinos muy conocidos, un escribano y un prestamista habrían intervenido en una maniobra de lavado de dinero y fraude inmobiliario.
“Tuvimos la necesidad de pedir un dinero”
Laura Inés Paré contó que todo se inició en 2010:
“Tuvimos la necesidad de pedir un dinero en el año 2010. Necesitábamos el dinero para pagar la escuela de nuestros hijos”, explicó.
Relataron que al ver un anuncio de préstamos personales, se habrían contactado con un señor de apellido Risso, quien los derivó a la financiera Warrent y luego a la escribana Graciela Gagliardi.
“Nos dieron en ese momento 8.300 pesos y dejamos las escrituras como garantía”, detallaron.
Contratos y escrituras en disputa
El matrimonio afirma que nunca recibió copia de un contrato de venta, aunque posteriormente se habría presentado un documento que indicaba que habían cedido la propiedad por ese monto.
“En ningún momento hubiésemos firmado si sabíamos que por 8.300 pesos nuestra casa pasaba a ser de otra persona”, aseguraron. “Nosotros nunca firmamos ese contrato”, añadieron.
También expresaron sus sospechas:
“Lo que nos extraña fue por qué nunca nos dieron el papel cuando solicitamos el préstamo”.
Según explicaron, recién en noviembre de 2022 habrían tomado conocimiento de ese contrato, cuando fueron citados por el Dr. Ceccini.
El temor a perder la casa
El matrimonio aseguró que siempre intentó cumplir con los pagos:
“Los abogados nos citan porque dicen que dejamos de pagar; siempre tuvimos voluntad de pago”.
“Mi esposo sacó otro préstamo por 50 mil pesos y se lo llevamos para saldar con ellos”, señalaron.
Sin embargo, denunciaron que el proceso avanzó y hoy la situación es crítica:
“Nos dijeron que el 28 de agosto iban a rematar nuestra casa”.
“Ya no sabemos a dónde recurrir”, lamentaron.
“Nos decían que al día de hoy debíamos 46 millones de pesos para que no se remate la casa”, añadieron.
Apelación a la justicia y llamado a otras víctimas
Los denunciantes aseguraron que su abogado realizó una presentación judicial para intentar frenar el remate.
“Yo creo en la justicia, pero más creo en la justicia de El Señor”, expresó Laura.
Finalmente, enviaron un mensaje a posibles damnificados:
“Si a otra persona también le sacaron la casa, que no tengan miedo y denuncien”.