La canasta básica total (CBT) que define la línea de la pobreza alcanzó casi $ 140.000 millones para una familia de cuatro miembros, dos adultos y dos niños o niñas menores, informó esta tarde el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Supone un incremento del 9% en el mes, impulsado por la aceleración de la inflación en octubre.
El organismo estadístico oficial destacó, además, que la canasta básica alimentaria (CBA), que define la línea de indigencia quedó en $62.106 en el décimo mes del año. El salto mensual fue de 9,5%, marcando una disparada del indicador para medir la indigencia por ingresos.
De esta manera, este mes se registró el mayor incremento de ambas canastas desde abril de 2018, cuando comenzó a relevarse la pobreza e indigencia a partir de los ingresos del grupo familiar. En el caso de la indigencia el avance en los últimos doce meses trepó a 100,8%.
En incremento interanual de las dos canastas está incluso por encima de la inflación anualizada. De acuerdo a la medición oficial el índice de precios al consumidor (IPC) acumuló entre octubre de 2021 y el mismo mes de este año 88%, mostrando claramente que las canastas corren a una velocidad mayor que la inflación del conjunto de la economía.
Hay que tener en cuenta, además, que mientas la canasta básica alimentaria mide sólo consumos básicos, la canasta básica total incluye también algunos servicios como saludo, educación, comunicaciones y transporte, muchos de los cuales tienen precios regulados por el Estado.
Esto explica que el incremento de la canasta básica alimentaria haya tenido una suba mucho mayor que la que incluye servicios, que tienen precios regulados, muchos de los cuales están “pisados” para evitar una aceleración aún mayor de la inflación.