Los casos de coronavirus activos en la provincia son apenas 589. Mientras tanto, se acumulan las denuncias por maltrato y hacinamiento en los establecimientos dispuestos por el gobierno de Gildo Insfrán. La oposición recurrió a la CIDH.
Las postales del maltrato y el hacinamiento en los centros de aislamiento preventivo de Formosa se replican y son noticia en todo el país. La nueva polémica que envuelve al gobierno de Gildo Insfrán se destapó luego de la denuncia sobre las “condiciones inhumanas” de alojamiento en el Estadio Cincuentenario. Y se intensificó este jueves con las violentas imágenes de las detenciones de Gabriela Neme y Celeste Ruiz Díaz, dos concejalas opositoras que participaban de una protesta en la Escuela N° 18 Fray Mamerto Esquiú, otro de los lugares que alberga a los aislados.
En Formosa hay 100 centros de aislamiento -entre escuelas, hoteles y polideportivos- donde cumplen la cuarentena quienes ingresan desde afuera de los límites del territorio provincial. Y también hay 13 centros de alojamiento que reciben a los casos positivos de COVID-19 y los contactos estrechos. Según la información oficial hasta este viernes, 3113 personas se encuentran hoy en los centros de aislamiento y solo hay 589 casos activos en la provincia.
Personas con síntomas leves, asintomáticas e incluso que no tienen coronavirus son obligadas a permanecer en esos establecimientos, según las denuncias. Imágenes reproducidas por TN muestran a aislados encerrados, detrás de una ventana, denunciando el desamparo de niños y adolescentes sin sus padres, bebés sin atención pediátrica, el caso de familias con PCR negativos que llevan más de 20 días -el máximo establecido para el aislamiento son 14- adentro y no les permiten salir.
En los centros de aislamiento es habitual ver más policías que médicos. La custodia se extiende durante las 24 horas del día. Por las noches, las puertas se cierran con candado y se apagan las luces.
“Hacen que parezcamos reos en un motín. Jamás pensé en mi vida someter a mis hijos a esto”, dijo una mujer que pidió reserva de identidad por miedo a represalias, y que a través de su abogado presentó uno de los tantos hábeas corpus que se acumularon estos días contra el gobierno provincial.
Entretanto, los damnificados evalúan recurrir a la Corte Suprema, que en noviembre pasado ya debió interceder en otro caso que colocó a la administración de Insfrán en la agenda mediática nacional: los varados, a quienes no se les permitía regresar a sus hogares. A la vez, el senador Luis Naidenoff y el diputado Mario Negri presentaron una medida cautelar ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) denunciando la situación.
El descargo de Insfrán
“Cuando se pretende criticar a la provincia, con todo orgullo cada uno de nosotros tenemos que levantar la frente y decir que Formosa tiene los mejores indicadores (epidemiológicos) del país, y eso se debe a una política sanitaria”, señaló Insfrán este viernes.
El discurso se repite a través de los reportes oficiales con la información sanitaria. “Lo insólito de criticar desde la Ciudad de Buenos Aires la estrategia sanitaria que desde el inicio de la pandemia ha demostrado ser la más efectiva del país”, se publicó en el Facebook oficial del gobierno provincial.
Jorge González, el “superministro” de la gestión, se jactó de que Formosa registra apenas “siete muertos” desde el inicio de la pandemia. “Y los siete nos duelen muchísimo, porque a los siete los conozco con nombre y apellido”.
Sobre las particularidades de la estrategia sanitaria de Formosa, el ministro de Gobierno defendió la decisión de que “toda persona Covid positivo tenga que estar dentro del sistema de salud” y dijo que para eso crearon “dos tipos de alojamiento: el Hospital Interdistrital de la contingencia Covid-19 (por el hospital Evita de la ciudad de Formosa) para los casos moderados o graves”, y 15 centros de atención sanitaria en toda la provincia, “para las personas asintomáticas o leves”.
Además, González desmintió que el Gobierno de Formosa obligue a compartir el mismo espacio de aislamiento a personas contagiadas de Covid-19 con otras que no lo son.
”Eso es de una falsedad absoluta. No podemos permitir ubicar en un mismo lugar a una persona que es Covid positivo con otra que no es Covid positivo”, dijo en declaraciones a Radio 10.