El argentino entró a los 75 minutos del 2-0 a favor de su equipo ante Borussia Monchengladbach, por la Champions League. Más allá del pase a cuartos, el delantero no se fue muy contento.
Manchester City, que había triunfado 2-0 en Alemania, repitió la misma diferencia ante Borussia Monchengladbach en la vuelta de los octavos de final de la Champions League y clasificó a los cuartos de final. Sergio Agüero, quien arrancó en el banco de suplentes, ingresó a los 75 minutos y se fue enojado del campo de juego.
¿Por qué? Mientras todos sus compañeros se quedaron festejando en el Etihad Stadium, el Kun se fu directo a la zona de vestuarios. En el camino lo interceptó uno de los ayudantes de Pep Guardiola, su entrenador. Fastidioso, el delantero argentino le dijo: «No me pasan la pelota».
Acto seguido, se soltó del ayudante y se fue rezongando con una cara que dijo todo. Se fue mordiéndose el labio inferior. En medio de las especulaciones de su salida del conjunto inglés (se le termina el contrato en junio y lo quiere Barcelona), sus compañeros no ayudan para que lo piense y se quede.