Inicio del juicio y conformación del jurado
El juicio oral contra el clan Sena comenzó este martes en el Centro de Estudios Judiciales de Resistencia. Siete personas —entre ellas César Sena y sus padres, Emerenciano Sena y Marcela Acuña— llegan a debate ante un jurado popular. La primera etapa es la selección de los 12 ciudadanos chaqueños que decidirán sobre la culpabilidad o inocencia de los acusados. Fiscales y defensores interrogan a los potenciales jurados para eliminar a quienes tengan vínculos o prejuicios que puedan afectar el veredicto.
Etapas previstas y cronograma procesal
Una vez conformado el jurado, el proceso avanzará con 17 audiencias previstas donde se expondrán peritajes, audios, mensajes y testimonios. Se estima la presentación de más de 50 testigos que intentarán reconstruir la desaparición y la dinámica de la relación entre la víctima y los acusados. La jueza técnica, Dolly Fernández, supervisará el cumplimiento del procedimiento, reservando la decisión final al tribunal popular.
Los imputados y los cargos que enfrentan
Los siete imputados están detenidos y afrontan cargos distintos según su supuesta implicación:
- César Sena (20): acusado de homicidio triplemente agravado (vínculo, violencia de género y concurso premeditado), delito que puede implicar prisión perpetua según la acusación fiscal. La Fiscalía lo señala como el supuesto autor material.
- Emerenciano Sena y Marcela Acuña: imputados como coautores por su presunta participación en la planificación y el encubrimiento del delito.
- Fabiana González, José Gustavo Obregón, Gustavo Melgarejo y Griselda Reinoso: acusados principalmente por encubrimiento agravado, vinculados a tareas como la limpieza de la casa, traslado de objetos personales y la quema de elementos en un campo de la familia (la llamada “chanchería”).

Las pruebas que sostienen la acusación
Aunque el cuerpo de la víctima no fue hallado, la fiscalía presenta cerca de 400 elementos de prueba. Entre ellos figuran:
- registros de cámaras de seguridad que ubican a la pareja en la vivienda familiar;
- rastros biológicos y objetos personales calcinados;
- mensajes de WhatsApp y búsquedas en internet que, según la acusación, muestran planificación y premeditación;
- audios y testimonios de testigos directos e indirectos.
Los peritajes y las pruebas forenses serán clave para que el jurado evalúe la hipótesis de homicidio y la participación de cada imputado.
Testigos y la voz de la familia de la víctima
La madre de Cecilia, Gloria Romero, será uno de los testimonios centrales. Romero, que viajó desde su provincia para asistir al juicio, declaró previamente que no percibió arrepentimiento en los acusados y pidió al jurado que imagine la dimensión del dolor que deja la pérdida de un hijo. Su intervención se espera con atención mediática y judicial dada la representatividad emocional que aporta al debate.
Marco legal y relevancia del caso
La legislación argentina permite juzgar un homicidio aun sin la localización del cuerpo cuando las pruebas resultan contundentes. La fiscalía sostiene que, en este caso, el conjunto probatorio alcanza ese umbral. Por su complejidad, la posible intervención de figuras políticas y la repercusión social, el juicio es considerado uno de los más relevantes en la historia judicial reciente de Chaco.
Durante el desarrollo del juicio se evaluará prueba por prueba, testimonio por testimonio, y serán los 12 miembros del jurado popular quienes —con la orientación legal de la jueza técnica— determinen la responsabilidad penal de cada imputado. El proceso promete extensos días de audiencias y un análisis minucioso de la cadena probatoria que deberá decidir un caso donde la ausencia del cuerpo convierte a la prueba indirecta en eje central.

