México anunció este sábado “el inmediato rompimiento” de las relaciones diplomáticas con Ecuador luego de que el gobierno presidido por Daniel Noboa decidiera invadir, de madrugada, la embajada mexicana en Quito para detener al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, quien había recibido asilo político por parte del mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
En un mensaje en la red social X, López Obrador calificó el hecho de “violación flagrante al derecho internacional y a la soberanía de México”.
Minutos después, la canciller mexicana Alicia Bárcena comunicó la ruptura de las relaciones con el gobierno ecuatoriano y advirtió que recurrirá a la Corte Internacional de Justicia para denunciar.
“Ante la flagrante violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y las lesiones sufridas por el personal diplomático mexicano en Ecuador, México anuncia el inmediato rompimiento de relaciones diplomáticas”, señaló Bárcena en un mensaje difundido en X.
La funcionaria remarcó que el personal diplomático saldrá del país sudamericano en lo inmediato y le pidió a Quito que “ofrezca las garantías necesarias” para su desplazamiento.
El ingreso
Uniformados ecuatorianos irrumpieron por la fuerza en la embajada mexicana, ubicada en el norte de la ciudad de Quito, frente al Estadio Olímpico Atahualpa, en una zona concurrida. La Policía y las fuerzas armadas montaron un operativo y salieron de la residencia con Glas detenido, quien fuera vicepresidente del gobierno de Rafael Correa entre 2013 y 2017, en un auto negro.
Roberto Canseco, jefe de la delegación mexicana en Ecuador, intentó intervenir para que no se lleven preso a Glas, pero fue retenido y reducido en el suelo por los uniformados, según videos divulgados a través de las redes sociales. “¡No puede ser, es un atropello!”, exclamó.
“Me golpearon contra el suelo. Traté de impedir que entraran. Delincuentes allanaron la embajada de México en Ecuador. Esto no es posible, no puede ser, es una locura. Estoy muy preocupado por Glas porque pueden matarlo. No hay ningún fundamento para hacer esto, es totalmente por fuera de toda norma”, aseguró Canseco.
México cierra filas
México se encuentra a menos de dos meses de las elecciones presidenciales que decidirán al sucesor de López Obrador. A pesar de las fuertes disputas por el poder, los candidatos cerraron fila con el gobierno y condenaron la invasión ecuatoriana.
“Se puede o no estar de acuerdo con la impartición de la justicia en otros países, pero las sedes diplomáticas de cualquier nación extranjera son inviolables”, escribió la candidata opositora de centroderecha Xóchitl Gálvez, quien representa la alianza entre el Partido de Acción Nacional (PAN), el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en X.
Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano y tercero en las intenciones de voto, afirmó que se trató de un “atentado contra la soberanía” mexicana. “Esa embajada representa al Estado mexicano y es inviolable. Es parte de nuestro territorio”, indicó también en X el aspirante presidencial opositor.
“Es una afrenta a la diplomacia y el derecho internacional que es inadmisible. Expreso toda mi solidaridad y respaldo al presidente López Obrador en la defensa de nuestra soberanía”, señaló en la candidata oficialista y favorita Claudia Sheinbaum, exjefa de gobierno de la Ciudad de México.
La postura de Ecuador
El gobierno ecuatoriano publicó un comunicado titulado “Defendemos la soberanía nacional, cero impunidad” en el que afirmó que “ningún ningún delincuente puede ser considerado un perseguido político”. “Jorge Glas ha sido condenado con sentencia ejecutoriada y contaba con disposición de captura emitida por las autoridades competentes”, subrayó el Ejecutivo de Noboa.
“Al haberse abusado de la inmunidades y privilegios, concedidos a la misión diplomática que albergaba a Jorge Glas, y conceder asilo diplomático contrario al marco jurídico convencional, se ha procedido con su captura”, justificó Ecuador.
El gobierno liderado por el presidente más joven de América Latina señaló que “toda embajada tiene una sola finalidad: servir como un espacio diplomático con el objetivo de estrechar las relaciones entre los países”. Sin embargo, Quito valoró que México no cumplió con esa finalidad.
“Ecuador es un país soberano y no vamos a permitir que ningún delincuente quede en la impunidad”, subrayó Noboa en el comunicado difundido en la madrugada del sábado.
La reacción de Rafael Correa
El expresidente ecuatoriano Rafael Correa denunció el asalto a la embajada mexicana en el que fue apresado su exvicepresidente Jorge Glas y acusó al actual mandatario, Daniel Noboa -quien ordenó el procedimiento- por confundir la Patria con sus “haciendas bananeras”.
“Lo que ha hecho el Gobierno de Noboa no tiene precedentes en la historia latinoamericana. Ni en las peores dictaduras se ha violado la embajada de un país. No vivimos un Estado de derecho, sino un Estado de barbarie, con un improvisado que confunde la Patria con una de sus haciendas bananeras”, escribió Correa en su cuenta en la red social X, en relación con la actividad empresarial del jefe de Estado, de 36 años.
Fuente: La Nación