El papa Francisco fue internado este miércoles en el hospital Gemelli de Roma por una infección respiratoria que lo obligó a suspender las audiencias previstas para este jueves y el próximo viernes.
Según informaron fuentes vaticanas, el sumo pontífice «pasó bien la noche». De acuerdo a lo explicado por Matteo Bruni, el director de la oficina de Prensa del Vaticano, el Papa se sometió a una serie de controles que mostraron «una infección respiratoria (excluida la infección por Covid 19)» por la que «requerirá unos días de tratamiento médico hospitalario adecuado».
Como motivo de la internación, Francisco suspendió todas las audiencias previstas para lo que resta de esta semana. Por el momento no hay precisión sobre las celebraciones previstas para la Semana Santa que inician el jueves 6 y que incluyen la realización del tradicional Via Crucis en el Coliseo el viernes 7.
En 1957, Francisco sufrió a sus 21 años la extirpación del lóbulo superior del pulmón derecho a causa de una infección pulmonar.
Este último miércoles, tras la audiencia general que encabezó por la mañana en la Plaza San Pedro, el pontífice suspendió una entrevista con un programa de la televisión italiana en la cárcel romana de Regina Coeli, apuntaron las fuentes, por una serie de dificultades respiratorias por las que fue finalmente llevado al Gemelli.
Al día siguiente de la imprevista internación del papa Francisco en el hospital Gemelli luego de un malestar y dolores en el pecho que resultaron ser una “infección respiratoria”, pasado el mediodía local llegaron noticias tranquilizadoras desde el Vaticano.
El director de la Sala de Prensa, Matteo Bruni, contó que el papa Francisco, de 86 años, “ha descansado bien durante la noche” y aseguró “que el cuadro clínico está en progresiva mejora” y que sigue “la terapia programada”.
“Esta mañana, después de haber desayunado, leyó algunos diarios y retomó el trabajo”, agregó, al precisar que antes de almorzar el Papa fue a la capilla privada que hay en su departamento del décimo piso del hospital, “para recogerse en oración y recibir la eucaristía”.
Una vez más, escueto y problemente por voluntad del proprio papa Francisco, que es reacio a dramatizar su estado de salud, el comunicado del Vaticano, que maneja la información con cuentagotas, no dio precisiones. No volvió a hablar de “infección respiratoria”, como ayer, en el segundo comunicado difundido después de las 20 locales, cuando excluyó una infección por Covid-19, reveló que el Papa en los últimos días había tenido “dificultades respiratorias” y anticipó que el Papa quedará internado “algunos días para una oportuna terapia médica hospitalaria”.