Preservación ambiental en una obra histórica
En el desarrollo del nuevo puente Santa Fe–Santo Tomé, el Gobierno de la Provincia implementa una estrategia de infraestructura con enfoque ambiental, articulando el trabajo entre el Ministerio de Obras Públicas, el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático, las municipalidades involucradas y la empresa constructora.
Desde el inicio del proyecto, se definió que el avance de la obra debía ir acompañado por acciones de protección de especies nativas. Por ello, se modificó la cota del acceso desde Santa Fe, lo que permitió conservar una hilera de lapachos adultos que, de otro modo, hubieran sido removidos.
Más de 600 lapachos serán reubicados
Además de preservar los ejemplares adultos, el plan incluye la reubicación de más de 600 lapachos jóvenes en distintos puntos estratégicos de la región.
Ya se realizó una primera entrega a municipios y a la Provincia, como parte de la estrategia de conservación a largo plazo.
“El ambiente es componente esencial en las decisiones de la Provincia. Esta histórica obra pública impulsada por el gobernador Maximiliano Pullaro y la vicegobernadora Gisela Scaglia, demuestra que se puede avanzar en infraestructura protegiendo nuestro patrimonio natural”, señaló el ministro de Ambiente y Cambio Climático, Enrique Estévez.

Obra pública con enfoque sostenible
El diputado provincial Pablo Farías destacó que se trata de “un mensaje contundente: hacemos obras imprescindibles y únicas en el país, preservando el ambiente. Esto es lo que se necesita a nivel nacional”.
En tanto, el senador por La Capital, Paco Garibaldi, resaltó que “además de los recursos destinados a la construcción, se contempla la cuestión ambiental de la obra. Se recuperarán cerca de 600 ejemplares de lapachos de la traza de acceso desde Santa Fe, lo que permite avanzar de manera responsable”.
Protección de flora y fauna locales
El plan ambiental contempla también la construcción de pasos de fauna en ambas cabeceras del puente, una medida que facilita el cruce seguro de especies y evita su aislamiento.
Paralelamente, se realizaron estudios y monitoreos del río Salado antes del inicio de los trabajos, con el objetivo de establecer líneas de base ambiental y guiar futuras intervenciones de manera sostenible.
De esta manera, la Provincia impulsa una infraestructura clave para la conectividad y la producción, con una planificación integral que combina desarrollo y sostenibilidad.
Redacción CFIN