Una intervención marcada por críticas
Durante el debate del Concejo, la concejala Violeta Quiroz expresó un rechazo contundente al proyecto de reforma previsional recientemente aprobado. “Este proyecto no es una reforma, es un ajuste encubierto”, afirmó al iniciar su exposición.
Según evaluó, las medidas no buscan corregir la gestión del sistema previsional, sino trasladar el esfuerzo a los trabajadores.
Cuestionamientos al aumento del aporte y a las limitaciones
Quiroz señaló que la suba del aporte personal del 13% al 16% constituye “un descuento directo al bolsillo de quienes ya sostienen el sistema”, y remarcó que se trata de una respuesta que no aborda las causas del déficit.
También criticó las nuevas condiciones para acceder a la jubilación por invalidez: “El sistema, en vez de cuidarte, te suelta la mano”, sostuvo al cuestionar los requisitos médicos reforzados y las restricciones para quienes no realizaron exámenes pre-ocupacionales.
Docentes y cómputo privilegiado: un derecho convertido en excepción
Respecto del régimen docente, la concejala advirtió que el cómputo diferenciado pierde su carácter de derecho si se exige cumplir con 30 horas frente al aula y aportar un 4% adicional para mantenerlo.
“Lo escriben como un beneficio, pero lo transforman en un lujo”, expresó.
Nuevos topes y acceso a pensiones
Otro de los puntos señalados fue el límite de edad para ingresar al sistema previsional. Quiroz planteó que la restricción para mayores de 50 años deja sin cobertura a personas que acceden tarde a su primer empleo formal.
En la misma línea, cuestionó el artículo 52 bis, que endurece los requisitos para acreditar convivencia y acceder a una pensión. “No las ven. No las quieren ver”, sostuvo sobre las parejas que quedan excluidas por falta de documentación formal.
Una advertencia política
Para Quiroz, el proyecto no ofrece soluciones estructurales. “Lo único que hace es recortar”, afirmó. Y cerró con un mensaje político directo: “Una reforma previsional puede discutirse, pero no basada en la quita de derechos adquiridos. Desde este lugar, no vamos a ser cómplices”.

