Dos ciudadanos, un peruano y un boliviano, fueron detenidos tras el aterrizaje forzoso de una aeronave en un campo del departamento San Jerónimo. Ambos tienen antecedentes por narcotráfico y están ligados a los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación. Están siendo investigados por su rol en operaciones hacia Estados Unidos y son buscados por Interpol.
El aterrizaje de emergencia de una avioneta en la localidad santafesina de Estación Díaz, departamento San Jerónimo, derivó en un operativo policial que culminó con la detención de dos tripulantes extranjeros: un piloto peruano y un copiloto boliviano, ambos con antecedentes por narcotráfico internacional.

Sus ocupantes fueron atrapados a unos 700 metros del hallazgo
Las primeras investigaciones revelaron que los detenidos estarían vinculados a los poderosos cárteles mexicanos de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG), organizaciones criminales responsables de operar redes de tráfico de drogas hacia los Estados Unidos. Interpol ya había emitido alertas por sus antecedentes delictivos.
El piloto peruano fue identificado como un operador activo en vuelos clandestinos que transportaban estupefacientes hacia Norteamérica. Había sido arrestado en 2020 en un operativo internacional junto a miembros de organizaciones mexicanas.
Por su parte, el copiloto boliviano cuenta con antecedentes desde 2021, cuando fue detenido en Bolivia al mando de una aeronave con matrícula CP-2982 que transportaba más de 420 kilos de cocaína proveniente del Perú. El hecho fue documentado por las autoridades judiciales de Cochabamba.
Tras el aterrizaje forzoso, se desplegó un amplio operativo de rastrillaje en la zona rural, con participación de la Policía de Acción Táctica (PAT), la Guardia Rural Los Pumas, la Unidad Regional XV y fuerzas federales, incluyendo drones, perros entrenados y dos aeronaves.

El combustible hallado en la avioneta
Los investigadores presumen que, antes de aterrizar, la avioneta pudo haber arrojado parte del cargamento de droga en las inmediaciones. La búsqueda se centra en campos cercanos y áreas de difícil acceso.
Este nuevo caso vuelve a poner en evidencia el uso del territorio santafesino como corredor del narcotráfico internacional, y refuerza las alertas sobre la presencia de organizaciones criminales extranjeras en la región.
La investigación continúa bajo secreto de sumario, y se esperan novedades judiciales en las próximas horas.