La presidenta del PRO ratificó su candidatura nacional, algo que la podría enfrentar al jefe de Gobierno porteño
Ya blanqueadas sus aspiraciones de convertirse en la próxima candidata a presidenta de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich admitió hoy diferencias con el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, otro de los dirigentes de la coalición opositora con proyecto nacional, al reconocer que “la relación ha dejado de fluir”.
¿El motivo? Bullrich está convencida que la armonía política que habían logrado durante la campaña legislativa se quebró cuándo ella dijo que aspiraba a realizar “un cambio a nivel nacional” descartando así su desembarco como candidata en la Provincia o la Ciudad de Buenos Aires.
Si bien remarcó que se encuentra en un “momento de espera y de construcción” porque todavía falta mucho para las próximas PASO, la ex ministra de Seguridad dejó bien claro hacia dónde apunta. “Si algo haría es trabajar por el país, no por la Provincia ni la Ciudad. Esos cambios no me gustan”, señaló al ser entrevistada en Radio Rivadavia.
Así, marcó sus diferencias respecto a la jugada política ideada por Larreta de poner como candidato a diputado en la Provincia a Diego Santilli, ex Ministro de Seguridad porteño; y a María Eugenia Vidal en Capital cuando ya había sido gobernadora porteña.
Consultada acerca de si Larreta está enojado porque le salió una nueva competidora, Bullirch fue contundente: “Sí”. Y agregó: “Es bueno hablarlo entre nosotros pero lo cierto es que teníamos una relación fluida que ha dejado de fluir. No me quiero detener a pensar por qué”.
Además, puso como ejemplo que antes tenían “reuniones semanales y quincenales” y ahora las conversaciones que mantienen son sólo dentro de la mesa de la coalición.
“Convivimos en el marco de Juntos por el Cambio pero es necesario una mayor interrelación en este momento tan difícil para el país y la gente. Es un momento de muchas frustraciones y es importante que lo trabajemos y volvamos a hacer fluir la relación”, afirmó Bullrich para dejar bien en claro que no quiere que se produzca una crisis interna por sus aspiraciones presidenciales.
Luego, como una forma de bajarle los decibeles a sus desacuerdos con Larreta, dijo: “La relación se puede arreglar en la medida que uno tenga voluntad, tampoco es que no se pueda arreglar”.
Durante la entrevista, la presidenta del PRO comparó las diferentes miradas que tiene con Larreta sobre el abordaje de la política. “Horacio tiene una idea más de negociar que de enfrentar”, resaltó como para despegarse de sus aspiraciones dialoguistas con el oficialismo.
“Si llega a hacer eso se le van a ir los cuatro años. Ese camino es el de mantener las cosas como están”, criticó con dureza Bullrich, quien se mostró convencida de que “el cambio tiene que ser más disruptivo y de shock”.
En ese sentido, dijo que es necesario “poner sobre la mesa todas las cosas que haya que cambiar para generar confianza y bajar la inflación de manera rápida”.
Una de las cuestiones que hay que replantearse, insistió, es la reestructuración de las empresas públicas que generan déficit. “Todas las empresas públicas tienen que ser reestructuradas, o son viables o entran en un camino de privatización”, se sinceró en sintonía a lo expresado por el ex vicepresidente Mauricio Macri respecto a Aerolíneas Argentinas.
“No se pueden gastar 3 mil millones de dólares en una empresa a costa de todos los argentinos. Eso no puede pasar. Es una estrategia que estamos trabajando respecto a un modelo de reestructuración general por el déficit que tienen”, enfatizó.
Por último, se refirió a la reaparición pública Macri, de quien destacó su entusiasmo por discutir el futuro de Juntos por el Cambio. “Eso nos da una dinámica respecto hacia dónde vamos a ir y cómo vamos a construir la colación con miras a 2023″.
Y aprovechó para descartar que sea el próximo tercero en discordia entre ella y Larreta: