La tranquilidad habitual del Jardín de Infantes Nº 65, ubicado en Seguí al 5600 en la zona sudoeste de Rosario, se vio interrumpida el martes por la tarde cuando docentes detectaron que un niño de 4 años había ingresado al establecimiento con un arma de aire comprimido en su mochila.
El revólver fue hallado durante la jornada escolar y, ante el desconcierto del personal, se activó de inmediato el protocolo previsto para este tipo de situaciones. Se dio aviso a la policía y al Ministerio de Educación de Santa Fe, cuyos equipos acudieron al lugar.
Fuentes oficiales confirmaron que se trataba de un arma de aire comprimido, no de fuego, lo que llevó cierto alivio en medio de la conmoción inicial. Sin embargo, el hecho encendió alarmas en la comunidad educativa.
El Ministerio de Educación informó que intervino el equipo socioeducativo, que mantuvo un encuentro con la familia del menor para intentar esclarecer cómo llegó el arma a su mochila. Una de las hipótesis es que fue colocada allí por un adulto sin que el niño supiera de su presencia.
Luego del episodio y las actuaciones correspondientes, la actividad en el jardín continuó con normalidad, aunque con un clima de asombro y preocupación entre las familias y el personal docente.