Pity Álvarez fue trasladado desde la cárcel de Ezeiza a un centro terapéutico del la localidad de Castelar, según informó la madre del músico.
El músico Christian Pity Álvarez fue trasladado desde la sede del programa de salud mental del penal federal de Ezeiza a un centro terapéutico de la localidad bonaerense de Castelar para llevar adelante un tratamiento psiquiátrico, informó hoy su madre y fuentes allegadas a la causa.
Abandono de persona
Además, Cristina Congiu, madre del exlíder de Viejas Locas, aseguró que su hijo “sufrió un tremendo abandono de persona” mientras estuvo preso.
La mujer dijo que “Pity” fue llevado al centro terapéutico, luego de permanecer años alojado en la sede del Programa Interministerial de Salud Mental Argentino (Prisma), del Complejo Penitenciario de Ezeiza, donde estuvo detenido por el crimen de Cristian Maximiliano Díaz (36).
Congiu contó que meses atrás su hijo contrajo coronavirus, por lo que estuvo internado en terapia intensiva del hospital Muñiz, del barrio de Parque Patricios.
“Christian la pasó muy mal por el tremendo abandono de persona que sufrió en el penal”, expresó la mujer, y agregó que “lo que pasa con su enfermedad lo adquirió ahí por el aislamiento y la falta de atención”.
Por su parte, Javier Marino, abogado de Álvarez, explicó que por el momento el juicio al que debe ser sometido el músico por el delito de “homicidio” está suspendido, ya que la Justicia consideró que en la actualidad “Pity” no está en condiciones psíquicas de afrontar el proceso.
Debido a ello, en abril pasado, los integrantes del Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional (TOC) 29, María Ramos Padilla y María Cecilia Maiza, resolvieron, en línea con lo planteado por el fiscal Sandro Abraldes en su dictamen, hacer cesar la prisión preventiva de Álvarez por considerar que “no resulta constitucionalmente válido mantener el encarcelamiento cautelar por un tiempo absolutamente indeterminado, dado que no es posible pronosticar, de momento, cuándo podrá encontrarse en condiciones psíquicas de afrontar el juicio oral”.
El hecho por el que el excantante, guitarrista y compositor de las bandas de rock Viejas Locas e Intoxicados está acusado ocurrió el 12 de julio de 2018 a la 1.30 frente a la puerta de acceso a la Torre 12 B del barrio Samoré, en Dellepiane Sur y avenida Escalada, de Villa Lugano.
Según la acusación, Álvarez salió de allí junto a su novia y de repente se acercó a ellos Díaz, un conocido del barrio con quien comenzó una conversación que derivó en una discusión.
Según lo que reconstruyó el juez de instrucción Martín Yadarola, esa discusión fue porque la víctima le recriminó a “Pity” andar diciendo que él le había robado unas pertenencias de una mochila.
Testigos afirmaron que Díaz empujó e intentó pegarle a “Pity”, momento en que éste extrajo una pistola calibre 25 y le efectuó un primer tiro en la cara y luego lo remató de otros tres.
Poco después, Álvarez abordó con su novia un Volkswagen Polo, a los pocos metros le pidió a la joven que arrojara la pistola en una alcantarilla de la colectora de Dellepiane Sur y desde allí ambos fueron al local bailable “Pinar de Rocha” de Ramos Mejía.
Álvarez estuvo casi un día prófugo hasta que el 13 de julio de 2018 se entregó en la comisaría 52, único momento en el que se refirió al hecho cuando le dijo a la prensa: “Lo maté porque era él o yo. Y creo que cualquier animal haría lo mismo”.