Aguas Santafesinas SA (Assa) implementó durante 2024 un fuerte ajuste con un aumento del 450% en el precio de la tarifa del servicio, cuando la inflación del año pasado fue del 117,8 por ciento. En 2025 la historia continúa y repercutirá en el bolsillo del usuario: este martes se llevó adelante una audiencia pública para discutir el aumento de la tarifa solicitado: se trata de un 30% dividido en tres tramos de un 10% cada uno.
El procedimiento para convalidar el aumento implica la realización de la audiencia pública. Tras ello, el Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Enress) deberá emitir un dictamen, pero que no es vinculante. Cumplida esa instancia, el Ministerio de Obras Públicas resuelve si concede el aumento y cómo se instrumenta.
El pedido de aumento fue formulado y justificado por Anahí Rodríguez en su carácter de titular de ASSA, aunque luego fue designada al frente de la EPE y se nombró en su reemplazo a la ex secretaria de Transporte, Renata Ghilotti.
El gobierno provincial argumentó que los aumentos son necesarios para reducir el déficit y mejorar la infraestructura del servicio. Lo cierto es que la suba ya está en marcha y se suma otro ajuste en servicios esenciales, como el 28% aplicado por la Empresa Provincial de la Energía (EPE).
La postura del gobierno de Santa Fe
El ministro de Obras Públicas de Santa Fe, Lisandro Enrico, detalló la situación actual de la empresa, las medidas implementadas para su sostenibilidad y los desafíos de infraestructura que enfrenta. El funcionario explicó que ASSA fue recibida en condiciones críticas al inicio de la gestión, con un 75% de sus gastos no cubiertos por las tarifas y sostenidos con fondos del gobierno provincial. Desde entonces, se inició un proceso de reestructuración que ha logrado reducir el déficit a un 30-40%.
“El objetivo es lograr una empresa más eficiente, con mejor respuesta a los vecinos y mayor sustentabilidad, sin depender exclusivamente de aumentos tarifarios”, aseguró el ministro.
Enrico valoró la instancia de la audiencia pública y consideró que es oportuna para escuchar las posturas de la ciudadanía y fortalecer la transparencia en la toma de decisiones. Sin embargo, la decisión final sobre el ajuste corresponde al gobierno.
El directorio de Aguas Santafesinas pone la lupa sobre los gastos y se abre una pulseada con el sindicato.
Según se informó, el ajuste tarifario será gradual y dependerá de la situación económica e inflacionaria del país. El funcionario indicó que se busca mantener un equilibrio entre la sostenibilidad de la empresa y el impacto en los usuarios, con especial atención en el consumo responsable y racional del agua.
Sobre las quejas y reclamos, expresó: “Entendemos los reclamos y trabajamos para mejorar el servicio. Este ajuste busca garantizar la continuidad de un sistema que, sin una buena ecuación económica, no puede dar respuesta adecuada a las necesidades de los vecinos”.
Los argumentos de Aguas Santafesinas
La saliente titular de la empresa, Anahí Rodríguez, –quien será reemplazada por Renata Ghilotti– dejó firmado el pedido de aumento y justificó ese requerimiento. “Ingresamos una petición mínima para tener tarifas reales y poder invertir en el servicio”, expresó la funcionaria al momento de elevarlo.
Rodríguez dijo también que Assa es una empresa que al asumir la nueva gestión santafesina tenía “más del 90 por ciento de su presupuesto cubierto por el estado provincial y hoy el 70% lo cubre la propia empresa”.
“Estamos saneando la firma”, destacó Anahí Rodríguez y añadió que el pedido es para aumentar un 30 por ciento en “tres tramos de 10% de aumento”.
“La autoridad de aplicación lo definirá después de la audiencia pública”, concluyó la saliente titular de Assa.
Fuente: La Capital