El ex diputado socialista organizó un encuentro con dirigentes del progresismo para analizar la realidad de Santa Fe y el país
El encuentro de Bases, línea interna del PS, se desarrolló en un colmado Centro de Empleados de Comercio.
El Frente Progresista, y en particular el socialismo, ya discute a cielo abierto la propuesta de una sector de esta fuerza política de acordar en la provincia de Santa Fe una alianza con el macrismo. “La derecha tiene un trípode que se ha consolidado de manera muy importante: la corporación judicial, los grandes medios de comunicación y una tercera pata que es la Embajada de los Estados Unidos”, señaló el ex diputado socialista y líder de la corriente de opinión Bases Eduardo Di Pollina, durante la jornada de intercambio de ideas denominada “Perspectivas para una sociedad igualitaria: La izquierda democrática y la construcción de una agenda progresista”, donde calificó al PRO como “partido orgánico de la Embajada de Estados Unidos y su herramienta electoral es Juntos por el Cambio”.
Di Pollina volvió a rechazar una alianza con el macrismo en la provincia de Santa Fe, idea que alientan los sectores mayoritarios del socialismo que encabezan Antonio Bonfatti, Mónica Fein y Enrique Estévez. “El socialimo no puede estar nunca con la derecha conservadora y las minorías que avanzan sobre los derechos de la gente””, aseveró. Y señaló la contradicción que existe entre los intereses del campo popular y los intereses de los sectores concentrados de la economía, ante lo cual resulta necesario desarrollar el diálogo y la unidad de todos los sectores populares para poder enfrentar a la derecha, atento a que en el 2023 estará en juego el futuro de Argentina.
El arco opositor estima que en Diputados tiene 133 votos para aprobar el proyecto de boleta única papel.
“La derecha tiene un trípode que se ha consolidado de manera muy importante: la corporación judicial, los grandes medios de comunicación y una tercera pata que es la Embajada de los Estados Unidos”, señaló el ex titular de la Cámara de Diputados y agregó: “La embajada estadounidense tiene un partido orgánico en Argentina; ese partido es el PRO y su herramienta electoral es Juntos por el Cambio. Estos partidos políticos y los personajes nefastos de la ultraderecha que han surgido en los últimos tiempos, abonan al mismo proyecto: el regreso del neoliberalismo al gobierno”.
Para Di Pollina “el gran desafío” que tienen los sectores progresistas y de izquierda “es la obligación militante de construir propuestas para consolidad el campo popular. Un proyecto que permita a nuestro pueblo realmente salir de la situación en la que vive. En este camino nos van a encontrar siempre juntos”, señaló y abrió el juego a los otros oradores que provenían de diferentes espacios.
El auditorio del Centro de Empleados de Comercio, donde se desarrolló la actividad, estaba colmado, a lo que sumaron aquellos que participaron de manera virtual.
La diputada provincial socialista Claudia Balagué (ex ministra de Educación santafesina) sostuvo que “el neoliberalismo y sus consecuencias sociales de exclusión y de pobreza en nuestro país, hacen urgente generar propuestas alternativas que defiendan lo público como condiciones necesarias para una sociedad más justa e igualitaria”.
En tal sentido, sostuvo: “Yo estoy convencida que el progresismo tiene pulsión por la igualdad y esa pulsión la tenemos que aprovechar para seguir construyendo. No tenemos que olvidarnos entonces de las políticas emancipadoras: salud, educación, derecho al trabajo, son las políticas emancipadoras que tenemos que volver a discutir”.
Por su parte, Alicia Gutiérrez, del Partido SI y directoral de Derechos Humanos de la Municipalidad de Rosario, manifestó una rotunda negativa a cualquier “alternativa que tenga que ver con Cambiemos y el neoliberalismo. También manifestó su visión de una legislatura santafesina donde el Senado actúa como cuerpo legislativo del siglo XIX, “cobrando peaje” al Poder Ejecutivo y a la Cámara de Diputados cada vez que tiene que sacar un proyecto de trascendencia, impidiendo el avance de normas tan necesarias como la ley de educación o la ley de salud. Por ello enfatizó la necesidad de una reforma constitucional que desarticule estos mecanismos a través de la implementación de una legislatura unicameral.
Carlos del Frade, diputado del Frente Social y Popular, analizó los partidos de Santa Fe, considerando su actuación como un “partido único santafesino”, ya que tanto el peronismo como el radicalismo han sido expresiones políticas que no han logrado la transformación de las estructuras del poder, y manifestó la necesidad política de crear una alternativa de izquierda y progresista superadora de la que ofrecen los partidos tradicionales.
A su turno, el filósofo y ex concejal peronista Juan Giani calificó al encuentro de “una asamblea simbólica” a la que debía “dotarse de contenido político, dando continuidad de construcción a un polo de centro izquierda que se oponga a la centro derecha que avanza en nuestro país”. En cuando a Santa Fe, señaló que “el frente de frentes” que se está configurando “no sólo incluirá al PRO, sino que sumará a la Ucedé, a los referentes evangélicos, a Amalia Granata y a todas las expresiones más reaccionarias de la política”.
La concejala de Ciudad Futura Caren Tepp valoró la convocatoria y la importancia de involucrar a nuevos y más sectores de la izquierda y del progresismo, a las organizaciones sociales y a todos aquellos que compartan la necesidad imperiosa de mejorar la calidad de vida de la gente. Asimismo, manifestó las contradicciones de los referentes que se autoidentifican con el progresismo pero plantean que basta un acuerdo programático con cualquier espacio para construir alianzas en las que únicamente “Milei es límite”.
La diputada de Igualdad Agustina Donnet, puso de relieve cómo se puede generar cambios desde “abajo hacia arriba”, dando el ejemplo de Gabriel Boric en Chile y demostrando que existen antecedentes y experiencias exitosas en construcciones de este tipo.
Fabián Palo Oliver, diputado radical, rescató su formación en las filas del alfonsinismo, desde donde se comprendía que la confrontación era con los sectores conservadores, y en la representación y defensa de los sectores medios y populares, reivindicó la experiencia del Frente Progresista y lamentó que hoy la conducción mayoritaria de su partido se encuentre lejos de aquella esencia.