Lo venimos diciendo en nuestros medios, no puede ser que a la salida de los boliches, particularmente en la ciudad de Santa Fe, sucedan cosas aberrantes, abusos, agresiones, asesinatos y nadie se hace responsable.
Claro, los propietarios de esos Boliches afirman que ellos deben contratar seguridad privada para brindar seguridad en el interior de sus locales.
La “picardía” de ellos y los patovicas es, depositar a la víctima y a los agresores, en la vereda o en la calle, para que su problema termine ahí.
No puede ser.
Los gobernantes, nacionales, provinciales y municipales deben hacerse cargo de este inconveniente que a veces llegan a mayores, en muertes, como es el caso de Fernando Sosa Baez.
Sobre la ruta 168 en la Capital santafesina funcionan boliches que como en todos lados, no contratan seguridad privada ni pagan adicionales de policias para que antes, durante y después que finalice el boliche, brinden la seguridad que requieren los jovenes que asisten a esos lugares.
Los concejales deberían impulsar una norma para que los dueños de esos boliches, brinden toda la Seguridad necesaria a los jovenes, adentro y afuera.
Hay ataques a jovenes, hombres y mujeres, se sabe que hasta abusos y violaciones.
No puede ser.
Pero alguien tiene que hacer algo.
¿O el negocio de los boliches lo impide?.
Fuente: CFIN