El futbolista de Boca Juniors fue acusado de violar y agredir físicamente a una mujer. Su ex pareja Daniela Cortés ya lo había denunciado en 2020 por violencia de género
Tras la acusación judicial por violencia de género que recibió Sebastián Villa en plena pandemia (año 2020) de parte de su ex pareja Daniela Cortés, caso por el que todavía está pendiente una audiencia oral, el futbolista de Boca Juniors recibió una nueva denuncia por parte de una mujer: lo acusaron de abuso sexual y tentativa de homicidio. La persona que realizó la acusación, que estaría manteniendo una relación sentimental con el jugador desde hace dos años, detalló que el hecho ocurrió el 26 de junio del año pasado en una casa ubicada en un barrio privado de la localidad de Ezeiza.
En el relato de la acusación realizada por la mujer (iniciales R. D.) se advierte que Villa habría abusado de ella después de haber asistido a un asado con un grupo de jugadores de Boca, en el domicilio del futbolista colombiano. Según pudo corroborar Infobae, la presentación ya ingresó al juzgado de Lomas de Zamora y la fiscalía especializada en violencia de género se hará cargo del proceso.
El vínculo con el deportista se había iniciado a comienzos del 2020, aunque la relación “tuvo idas y vueltas” según consta en la presentación ante la Justicia. Hasta el momento del hecho denunciado, no se habían registrado acontecimientos de violencia física pero sí agresiones “verbales” con “palabras descalificantes”.
Roberto Castillo, abogado de la denunciante, habló del tema en TyC Sports: “Es una chica que llegó al estudio por haber sufrido un abuso sexual, lesiones que a mi criterio son graves y una conducta que nosotros entendemos que podría encuadrarse en una tentativa de homicidio. En ese sentido es una chica que tuvo mucho miedo todo este año, tuvo muchas comunicaciones por parte del entorno de la persona que denunciamos, ella misma considera que darle publicidad a su denuncia de alguna manera la resguarda. Si no promovió la acción penal antes fue por temor. Ahora quiere cerrar esta pesadilla que vivió, quiere buscar reparación y justicia”.
Entre otras líneas, el escrito de la damnificada –al que Infobae tuvo acceso– manifiesta que en el marco de una escena de celos, y luego de haber ingerido más de una botella de whisky, Villa “comienza acariciarme el pelo, me seca las lágrimas y me empieza a besar, pero acto seguido me aprieta devuelta la mandíbula con mucha fuerza -impidiéndome respirar por muchos segundos hasta que logré zafarme de esa situación-, y me muerde de manera violenta los labios. En esos momentos pensé que pretendía matarme”. La mujer afirmó que fue abusada por el jugador y que durante esa agresión se fue “quedando sin aire” producto del accionar de Villa.
En la denuncia la mujer no solamente menciona a Sebastián Villa por su violación y agresión física (especificó que la penetró sin su consentimiento, la tomó en reiteradas oportunidades de su mandíbula y una pierna y la cacheteó) sino también a dos hombres que trabajan como guardaespaldas del jugador de 25 años, que no participaron de las agresiones pero sí habrían encubierto lo ocurrido. La escena, según el relato en la denuncia, se inició en la habitación de la casa cuando el futbolista de Boca habría tomado del rostro a su pareja reclamándole un supuesto interés sentimental por un compañero de plantel. En la presentación se advierte que el jugador estaría alcoholizado al momento del hecho.
La narración también da cuenta de lo que habría sido su escape del domicilio del jugador: se comunicó por mensajes vía teléfono celular con una amiga llamada A. N. que acudió al lugar para asistirla. Expresó que luego de varios minutos de ruego ante Sebastián y su guardaespaldas, consiguió retirarse entre agravios verbales y meterse en un coche Uber que habían pedido unas mujeres que hacían “presencia” en ese mismo sitio.
En tanto, informó que luego del episodio, el entorno del jugador intentó sobornarla para que no contara lo que había sucedido y hasta recibió una suma de dinero en dólares a cambio de su silencio. La obligaron a borrar pruebas audiovisuales que incriminarían al colombiano, pero las mismas ya habían sido reenviadas a otras personas ligadas al entorno de la chica. Entre las pruebas, existen dos fotografías correspondientes al glúteo de la suscripta donde se visualizan grandes hematomas intramusculares, signos de violencia y lesiones ocasionadas; varias grabaciones en formato de video de las comunicaciones telefónicas mantenidas entre Villa y la mujer; además de constancias de revisión médica realizadas en el Hospital Penna, por parte de la Jefa de Unidad de Guardia.
El letrado de la mujer está en contacto con los tribunales de Lomas para adjuntar ante la fiscalía que tome el caso las fotos, videos y audios, evidencias de la denunciante que todavía no fueron presentadas. “Principalmente lo que hicimos fue poner a resguardo toda la prueba. Cuando podamos presentarla primero en sede judicial, seguramente saldrá a la luz porque es una causa con un impacto público terrible. Entendemos que lo primero que queremos hacer es constituirnos como particular damnificado y aportarle la prueba para que cuanto antes la tenga la fiscalía especializada y que no se corra ningún riesgo, ya que ella tiene miedo por el contexto, el entorno y la persona a la que denuncia, que mas allá de ser una persona física es prácticamente una empresa y hay muchos intereses”, amplió.
El equipo que representa legalmente a R. D. pidió una restricción perimetral para Villa y solicitó que se la cite a ratificar y ampliar la denuncia impetrada con carácter urgente. Además, elevó un pedido para que prestaran declaración tres testigos del hecho: los dos custodios de Villa y un familiar de la mujer.
Luego de que a fines de abril de 2020, en plena pandemia y sin actividad oficial, Villa fuera denunciado por su ex pareja Daniela Cortés, el caso tomó trascendencia pública y a los pocos meses el club determinó excluir al futbolista de los partidos por campeonato y copas. “Ante los hechos que involucran a un jugador del plantel profesional, ya está en contacto con los abogados y representantes del jugador para profundizar sobre el episodio y tomar las medidas que correspondan. Desde ya, el club se pone a disposición de la Justicia en todo aquello en lo que pueda colaborar para el esclarecimiento del suceso, en concordancia con el compromiso asumido por esta directiva en materia de derechos humanos y cuestiones de género”, se informó en ese entonces.
El equipo que comandaba Miguel Ángel Russo volvió a las competencias oficiales tras el parate por la pandemia del coronavirus y Villa vio todo desde afuera. Un par de meses más tarde y con el caso avanzado, en noviembre de 2020, retornó a las canchas en un triunfo ante Newell’s.
Fue justamente el episodio por el que Villa tendrá que comparecer ante la Justicia que la entidad de la Ribera confeccionó, aprobó y publicó en septiembre de 2021 un Protocolo de actuación en caso de violencia en razón de género, identidad de género u orientación sexual.
Entre los 22 artículos con los que se nutre el instructivo, se especifica que “de resultar una resolución sumarial de condena se podrán aplicar según la gravedad de los hechos denunciados las sanciones previas en el Estatuto Social, tales como amonestación, suspensión, cesantía, expulsión y/o cualquiera otra sanción ya prevista en el Estatuto Social y/o que pudieran incluirse en el futuro”.