Ri Sol-ju fue vista por última vez en los medios estatales el 25 de enero de 2020. Su ausencia alimenta truculentas teorías
La esposa del dictador norcoreano Kim Jong-un lleva más de un año desaparecida de la escena pública, lo que encendió las alarmas de los analistas y alimenta aún más el enigma de Norcorea: una dictadura tan hermética que nadie sabe con certeza qué sucede allí dentro.
Ri Sol-ju, que se cree que tiene 32 años, fue vista por última vez en los medios de comunicación estatales sentada junto al dictador en el Teatro Samjiyon de Pyongyang para una representación del Año Nuevo Lunar que tuvo lugar el 25 de enero de 2020.
Dado el secretismo con el que el dictador maneja Norcorea y la propia fama de Kim jong-un, las teorías se multiplican: que está mal de salud, que la encarcelaron… hasta se dice que podría haber sido asesinada por orden de su marido. Sin embargo, los expertos en Corea del Norte recuerdan que su ausencia puede no significar nada de eso. Es que Ri ha desaparecido intermitentemente del ojo público durante meses en el pasado sin ninguna explicación.
Antes de esta ausencia, Ri aparecía repetidamente junto a su marido en público, por lo que los expertos sugieren que el cambio podría ser parte de una trasnfromación aún más profunda, la de la política exterior del dictador. Ahora, Kim ya no se preocupa por parecer un “líder mundial normal”
“Corea del Norte ya ha hecho suficiente hincapié en que Kim Jong-un es un líder normal del país que lleva a su esposa a los eventos”, dijo Lim Eul-chul, profesor de estudios norcoreanos en la Universidad de Kyungnam. “Pero ahora, para Pyongyang, los problemas económicos y los logros reales -no las formalidades o la imagen- son lo más importante y urgente”.
“El cambio en la situación de los asuntos exteriores podría haber afectado a la desaparición de Ri”, dijo Hong a NK News. “Cuando había múltiples cumbres con otros países, el papel de Ri -un papel universalmente esperado como primera dama- estaba en alza… Pero ahora, la diplomacia se ha estancado”.
“Su desaparición tambiém podría deberse al COVID-19. Como madre con hijos pequeños, participar en actividades públicas supone un riesgo de infección potencial”, dijo Hong Min, director de la división de investigación norcoreana del Instituto de Unificación Nacional de Corea (KINU). “Incluso Kim Jong-un acudió al menor número de visitas guiadas en el último año”.
Los medios de comunicación estatales norcoreanos presentaron por primera vez a Ri Sol-ju en julio de 2012, y desde entonces ha aparecido en actos públicos más de 100 veces. Pero los expertos dicen que la única aparición pública de Ri en 2020 fue en el Teatro Samjiyon y, a falta de información, crece el misterio
Ri acompañó a su marido durante el apogeo de la diplomacia norcoreana en 2018, cuando Kim se reunió con el presidente surcoreano Moon Jae-in y su esposa, Kim Jung-sook, en Pyongyang.
Ri también fue a Beijing con su marido en marzo de 2018 para reunirse con el presidente chino Xi Jinping, y lo saludó de nuevo en Pyongyang en junio de 2019. Todas estas visitas diplomáticas se sumaron a sus otros viajes con Kim Jong-un, como la visita a la zona turística norcoreana de Wonsan-Kalma, también.
De hecho, llegó a tener gran protagonismo. El 15 de abril de 2018, según reseñó el periódico estatal norcoreano Rodong Sinmun, la “respetada” primera dama se reunió con una delegación china sin Kim. En ese momento, algunos expertos pensaron que estaba ascendiendo a una mayor prominencia estatal. “Definitivamente hubo un momento en el que parecía que Ri Sol-ju iba a empezar a asumir gradualmente un papel como el de saludar de forma independiente a los dignatarios extranjeros”, dijo Hong.
Por ahora, los observadores de Corea del Norte están esperando que Ri reaparezca, y una vez que lo haga, probablemente no aparecerá en los medios de comunicación estatales tan a menudo como antes, según Lim.
“Ri puede asistir de vez en cuando a eventos relacionados con la familia, como su última aparición cuando se sentó junto a Kim Kyong Hui, [la tía de Kim Jong Un]”, dijo. “Corea del Norte ya no está presionada para planificar formalidades adicionales para que Ri asista a eventos sólo para mostrar que la esposa de Kim está bien”.
Vida secreta
La vida de la primera dama norcoreana, Ri Sol–ju, se mantiene en absoluta reserva. El año pasado, su nombre -que se cree es en realidad un seudónimo- estuvo en todos los medios internacionales cuando desertores en Corea del Sur usaron su rostro para una provocativa campaña de panfletos contra el régimen.
Se cree que la familia de Ri Sol–ju pertenece a la élite política del hermético país. Según el blog especializado North Korea Leadership Watch, su padre se desempeña como comandante de las Fuerzas Aéreas y Antiaéreas del Ejército Popular de Corea.
Entre los pocos datos conocidos, se sabe que Ri se crió en Pyongyang antes de estudiar música vocal en China. Como cantante, supuestamente actuó con la Orquesta U’nhasu, un grupo musical (probablemente ya disuelto) que toca principalmente con instrumentos occidentales. También fue una animadora que visitó Corea del Sur en 2005 para el Campeonato Asiático de Atletismo, según dijo un legislador de Seúl.
Ri Sol–ju y Kim Jong-un se habrían casado en el año 2009, aunque sus nupcias no fueron confirmadas por los medios estatales de Corea del Norte hasta el año 2012. El periódico The South Korea’s Times informó que el padre del actual dictador, Kim Jong-Il, habría arreglado apresuradamente el matrimonio después de sufrir un derrame cerebral en 2008. Aunque no hay datos certeros, se cree que la pareja tuvo tres hijos.
Meses atrás, se conoció que el dictador la obligó a cumplir ocho reglas:
1) Matrimonio arreglado: Ri Sol-ju se vio obligada a casarse con el líder supremo de Corea del Norte en 2008, después de Kim Jong-il, padre de su actual esposo, sufriera un infarto.
2) Adoptar un nuevo nombre después del matrimonio: Ri Sol-ju es su nueva identidad. Según varios informes, su nombre original, fecha de nacimiento y otros documentos, se han ocultado después de que se casó con el líder norcoreano.
3) Cortar vínculos con su propia familia: Ri Sol-ju no puede visitarla y no la frecuenta desde que se casó.
4) Código de vestimenta: en sus primeros años de matrimonio, se vio a Ri Sol-ju luciendo un estilo occidental, broches personalizados y muchos más. Sin embargo, todo esto ha cambiado con los años y ahora su vestimenta es más tradicional. Los informes dicen que la primera dama de Corea del Norte tiene pocas opciones de expresarse a través de su ropa y peinados.
5) Movimientos estrictamente controlados: sus apariciones públicas siempre están bajo control. Excepto en funciones o festivales nacionales, la mujer no puede acompañar a su esposo durante los horarios de cualquier dirección o evento nacional.
6) No hay fotos sin autorización: nadie puede tomar fotos de Ri Sol-ju sin el permiso del líder norcoreano.
7) No se le permite salir del país: Ri Sol-ju, que ha estudiado en China y había visitado Corea del Sur como animadora, no puede viajar fuera de Corea del Norte, salvo para viajes oficiales.
8) Embarazos secretos: debido a la mentalidad medieval de la familia suprema, Ri Sol-ju se ha visto obligada a ocultar sus embarazos hasta el parto. Muy pocas fotos de ella en las que se la nota embarazada aparecieron en línea. Se cree que después de dos hijas, finalmente en 2017 habría dado a luz el hijo varón, que podría continuar la dinastía.