El estimador mensual de actividad económica (EMAE) registró en diciembre una contracción de 2,2% respecto a igual mes de 2019 y una mejora de 0,9% con relación a noviembre.
De esa manera, la economía concluyó el año de la pandemia con el retroceso más pronunciado desde la crisis de fines de 2001, cuando fue de 10,9 por ciento.
Durante el 2020, las caídas más importantes en el nivel de actividad se dieron en abril y mayo, con mermas de 26,4% y 20,6%, respectivamente, en el marco de las medidas de aislamiento dispuestas para morigerar el avance del Covid-19.
La desaceleración comenzó en setiembre y octubre, con bajas de 6,9% y 7,4%, a lo que se sumó ahora noviembre, con un retroceso de 3,7%, el menor porcentaje desde el inicio de la pandemia.
Con la suba de 0,9% de diciembre, el nivel de actividad acumula ocho meses consecutivos de crecimiento. De esta forma, superó el nivel de marzo y se ubicó tres puntos por debajo del nivel prepandemia, de febrero pasado.
En términos interanuales, en diciembre la caída de la actividad se volvió a desacelerar, al marcar un retroceso de 2,2% (contra -3,7% de noviembre), registrando así la menor tasa de caída desde febrero.
Tras haber transitado el momento más intenso de la pandemia, con caídas en torno al 25% en abril y mayo, la actividad económica logró recuperarse en la segunda parte del año y cerró el 2020 con una caída del 10% promedio anual, menor a la proyectada inicialmente en el Presupuesto 2021, de -12,1%, destacó el Ministerio de Economía.
En el acumulado de 2020, sólo dos sectores exhibieron un incremento: Intermediación financiera (2,1% interanual) y Electricidad, gas y agua (0,8% i.a.).