El de Austria fue el quinto Gran Premio de Franco Colapinto en Alpine, aquel que iba a servir como tope para realizar un balance sobre su rendimiento y tomar una decisión con respecto a su futuro. Ese momento llegó y, pese a que el argentino no está pudiendo mostrar el nivel que sorprendió a propios y extraños durante su estadía en Williams -en gran parte porque este A525 es el peor auto de la parrilla-, desde la escudería francesa le dieron la confianza para que corra en Silverstone el próximo fin de semana. Igualmente, según asegura el New York Times, a través de su segmento deportivo The Athletic, su performance será evaluada «carrera a carrera».
Luego del Gran Premio de Miami, Alpine anunció que reemplazaría a Jack Doohan por Franco Colapinto, como consecuencia de un flojo rendimiento del australiano en las primeras carreras de la temporada. Flavio Briatore, principal asesor y uno de los propulsores de la contratación del pilarense, sentenció: «Después de revisar las primeras carreras de la temporada, hemos decidido poner a Franco en el auto junto a Pierre (Gasly) para las próximas cinco carreras».
Ese período pasó y los resultados del piloto de 22 años no fueron mucho mejores a los del australiano: aún no sumó puntos y recién se pudo meter a la Q2 en los últimos dos Grandes Premios. Sin embargo, hay aspectos que hacen pensar que el cambio es positivo y que sólo hace falta tiempo (y mejoras en el auto): la distancia entre ambos pilotos es menor a la que había antes y el ritmo de carrera de Franco es muy similar al de Gasly, un piloto que está cursando su novena temporada en la Fórmula 1.
Lo que está claro es que el argentino no se puede confiar, ya que cualquier traspié podría significar perder el asiento. Mientras su performance esté marcada por problemas propios del auto no correrá riesgo, pero si comienza a tener errores él como piloto, su lugar en la butaca comenzará a tambalear. Briatore fue claro tras el GP de España: “Si Colapinto rinde, estará al volante. Si no, ya veremos. Cualquier experimento que necesite hacer, lo haremos. No sé si Franco se quedará toda la temporada, pero ya veremos. Depende de su rendimiento».
Exceptuando Barcelona, se podría decir que lo mejor de Colapinto se vio en carrera. Más allá de que sus opciones de sumar puntos se disiparon pronto en cada una de ellas, su ritmo es bueno con relación al de su compañero y los problemas que lo dejan muy atrás en las posiciones tienen que ver con la falta de potencia del auto o con errores estratégicos del equipo.
Sin embargo, Franco está teniendo un gran déficit desde que llegó a Alpine: las prácticas libres. Siempre se ubica entre los últimos, lejos de Gasly y a distancias bastante significativas de la punta. En los últimos dos fines de semana pudo corregir durante la clasificación y al menos logró acceder a la Q2, pero da la sensación de que ese arranque con el pie izquierdo los viernes lo hace correr de atrás con respecto al resto de los pilotos con los que compite y sobre todo con su propio compañero. A él le cuesta sentirse «cómodo y conectado con el coche» y no puede «tomar impulso para el resto del fin de semana».
Más allá de que nota algunos avances en su monoplaza, todavía no tiene el feeling necesario para pasar al siguiente nivel. Así lo describió tras la carrera en Austria: «El auto fue un poco difícil de manejar, no muy consistente. Es rápido, pero es muy susceptible y no me dio la confianza necesaria para ir a alta velocidad. Fue un fin de semana difícil. En general, avanzamos un poco, pero algo no funcionó».
Franco Colapinto
Colapinto ha mostrado su disconformidad con respecto al A525 en varias ocasiones.
Colapinto dijo también que Briatore «lo apoyó mucho» durante este proceso, pero ha sido el propio italiano quien pidió mejoras en su rendimiento públicamente. Más allá de que el experimentado asesor es consciente de que actualmente tienen el peor auto de la parrilla, cree que el argentino puede dar más de sí y por eso su continuidad la somete a una evaluación constante.
De cara al 2026, año crucial debido al cambio de reglamento técnico de la Fórmula 1 y a la modificación del proveedor del motor de Alpine (pasarán de Renault a Mercedes), será clave para Franco sostener su asiento, ya que ahí se podrían ver mejoras significativas en el rendimiento del equipo.
Dentro del organigrama de la escudería, la única amenaza real es Paul Aron, que fue cedido a Kick Sauber y participará de las FP1 de Gran Bretaña y Hungría antes de regresar al equipo francés, donde lo aguardan otras tres prácticas más. Además, el estonio de 21 años dejó una grata imagen durante los test de postemporada en Abu Dhabi y también durante las pruebas con autos de temporadas anteriores.
El panorama es claro, si Colapinto es consistente y no comete errores groseros, su asiento para el futuro está asegurado; si no lo hace, la evaluación diaria por parte de las altas esferas de Alpine tendrán que tomar una decisión.
Fuente: tyC