El ministro de Seguridad provincial, Pablo Cococcioni, salió a cruzar a la anterior administración provincial este lunes por la mañana acerca de la gestión del servicio penitenciario. Esto sucedió tras la balacera con amenazas a la base de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) de la policía de la provincia, último capítulo de las amenazas proferidas a la figura del gobernador Maximiliano Pullaro y a la cúpula de Seguridad.
Ante las amenazas reiteradas a la figura del gobernador Maximiliano Pullaro como así también las que aparecieron en las últimas horas en la base de las TOE en Rosario, el ministro de Seguridad llamó a “reforzar todas las alertas en todas las dependencias policiales a fines de la prevención y trabajar fuertemente para el esclarecimiento del hecho”.
El ministro de Seguridad, Pablo Cococcioni dijo que los inhibidores de señal de Piñero no funcionan.
Cococcioni, sobre los inhibidores de señal en la cárcel de Piñero: “Gastaron una fortuna y no andan, compraron lo que no iba”
“Como hemos dicho en otras amenazas a nosotros o a gente allegada, de ninguna manera esto nos puede mover un milímetro de nuestra línea de trabajo y vamos a seguir con mucha firmeza llevando adelante todas las acciones que entendemos necesarias para devolverle la tranquilidad a los santafesinos”, aseguró.
Consultado sobre si estas amenazas en una base tan importante como la de las TOE en Rosario constituyen un socavamiento para el gobernador Pullaro, Cococcioni respondió: “Se inscribe en este contexto de respuestas ante la fuerte acción estatal que está emprendiendo la provincia de Santa Fe contra las bandas criminales, narcos y sicarios. Las acciones investigativas nos van a dar un esclarecimiento objetivo. Uno no puede hacer conjeturas, en esta materia es necesario a veces ser prudentes y aguardar los resultados de la investigación desde el punto de vista estrictamente objetivo y así lograr que se apliquen las sanciones a los responsables”.
Pullaro y el refuerzo de su custodia
En base a las constantes amenazas recibidas por Pullaro e interrogado sobre si se dispuso un refuerzo en la custodia para con el mandatario, el funcionario expresó: “Los dispositivos de seguridad están en marcha, no damos muchos detalles por razones obvias relativas a la seguridad. De ninguna manera vamos a desmantelar nuevamente el patrullaje preventivo en calle para tener policías que nos cuiden. Se están adoptando precauciones como lo haríamos con cualquier ciudadano que sufre una amenaza en la provincia de Santa Fe”.
Sobre los movimientos de presos en cárceles y su relación con las amenazas, Cococcioni destacó: “Como no se puede actuar es retrocediendo o aminorando el curso de acción porque sería una pésima señal que cuando el Estado intenta recobrar el control de la calle y de las cárceles se termine amedrentado por unos cuatro o cinco forajidos. Nuestra respuesta tiene que ser adoptar medidas cada vez más severas hasta el límite de lo que la ley nos permite”.
“Había un pacto con el delito”
Acerca de cómo vivían los presos de alto perfil y consultado sobre si tenían una situación de “comodidad” dentro de las cárceles, el funcionario provincial subrayó: “No había pabellones de alto perfil, estaban todos mezclados como cualquier preso viviendo una vida normal”.
“Los inhibidores de señal que ya de por sí no andan bien y fueron una muy mala compra de la gestión anterior estaban apagados de manera intermitente para no provocar la reacción de la población penal. Al no requisarlos, no prender los inhibidores y de alguna manera dejarlos que vivan una vida muy plácida y tranquila continuando con su actividad delictiva provocaba una falsa sensación de control o de calma en el servicio penitenciario que era sencillamente un pacto con el delito: «No molestamos a los presos y los presos no nos molestan a nosotros». Nosotros hemos emprendido acciones que indudablemente implican que molestamos, pero es porque se está restableciendo el orden penitenciario”, narró el funcionario.
Fuente: Diario Uno