Sucedió minutos antes de la medianoche a 20 metros de la Subcomisaría 10°. Dispararon a mansalva sobre la humanidad de Oscar Bonino, de 46 años, quien falleció en el hospital Cullen
Este viernes, cuando faltaban algunos minutos para llegar a la medianoche y por causas que son materia de investigación, atacaron a balazos a Oscar Bonino de 46 años en la puerta de su vivienda familiar ubicada en calle Amenábar al 4400,en barrio San Lorenzo. El hombre fue llevado de urgencia en un patrullero policial hasta el hospital Cullen. La víctima fue revisada por los médicos de la Emergentología que constataron su fallecimiento luego de recibir múltiples impactos de bala.
Denuncia y pedido de auxilio
Alrededor de las 23.45 una mujer corrió hasta la Subcomisaría 10° del barrio San Lorenzo para pedir ayuda porque a su hermano Oscar Bonino lo habían baleado a unos 20 metros de la dependencia policial. Oficiales y suboficiales de esa dependencia salieron corriendo hasta llegar al lugar, y en un patrullero con sirenas y balizas encendidas lo llevaron al hospital Cullen. Los otros policías pidieron apoyo.
Los policías de Orden Público y de Cuerpos que llegaron hasta el lugar, además de preservar la escena del crimen, dialogaron con los familiares de la víctima como también con los vecinos de la populosa barriada para obtener testimonio sobre él o los asesinos que terminaron con la vida de la víctima. A todas luces, el o los autores esperaron que Bonino llegará o saliera de su vivienda familiar para dispararle a mansalva. Varias vainas servidas de los balazos quedaron tiradas en el pavimento como mudo testigo de la ejecución a tiros de la víctima.
El fiscal de Homicidios en turno del Ministerio Público de la Acusación, Gonzalo Iglesias, que ordenó la realización de los peritajes criminalísticos de rigor, secuestrar imágenes de cámaras de videovigilancia públicas y privadas de la zona que pudieran contener el ataque criminal de él o los asesinos.
Los peritajes fueron realizados por los agentes del área Científica de la AIC, luego removieron el cadáver que fue llevado a la morgue judicial para la realización de la necropsia, y finalmente se ocuparon de buscar imágenes de las cámaras de videovigilancia de la zona.